Abrir una clínica de podología en España requiere cumplir con una serie de requisitos legales y administrativos para garantizar una práctica segura y conforme a la normativa vigente.
En este artículo te contamos los pasos necesarios para establecer tu propia clínica de podología.
Requisitos y pasos para abrir una clínica de podología
Para iniciar el proceso de apertura de una clínica de podología, se deben cumplir varios requisitos esenciales:
- Formación y títulos: El podólogo debe contar con la titulación universitaria en podología, un requisito fundamental para poder ejercer. Además, es importante asegurarse de que el personal cumpla con los requisitos sanitarios y de salud correspondientes, como los certificados de manipulación de alimentos o de primeros auxilios.
- Elección del local adecuado: El espacio donde se llevará a cabo la actividad debe ser apropiado tanto en tamaño como en accesibilidad. Es fundamental que el local cumpla con las normativas de seguridad, accesibilidad para personas con movilidad reducida y con los espacios necesarios para consulta y atención médica.
- Planificación sanitaria: Se debe cumplir con las normativas sanitarias, lo que implica tener las condiciones adecuadas de higiene y de seguridad tanto para los pacientes como para los profesionales que trabajen en la clínica. También es necesario tener instalaciones como esterilización y equipo médico certificado.
- Seguro de responsabilidad civil: Es esencial tener un seguro que cubra posibles daños durante la atención al paciente, un paso que garantiza la seguridad jurídica y protege la clínica frente a eventualidades.
¿Qué licencias se necesitan para abrir una clínica de podología?
Una vez que tienes claro el local y los pasos para poner en marcha la clínica, el siguiente paso es tramitar las licencias necesarias. Existen varias licencias clave para esta actividad:
Licencia de apertura
La licencia de apertura es de los aspectos más importantes para iniciarse en esta actividad, pues autoriza el uso del local para la actividad sanitaria. Para obtenerla, se debe presentar una solicitud en el ayuntamiento, junto con el proyecto de actividad, en el que se especifica la distribución y el uso de cada espacio, el cumplimiento de las normativas de seguridad e higiene, y la adecuación del local.
El ayuntamiento revisará estos aspectos y, en caso de ser necesario, podrá hacer inspecciones para verificar que todo esté conforme a las normativas locales y autonómicas.
Licencia de actividad
Además de la licencia de apertura, es obligatorio contar con una licencia de actividad, que asegura que la clínica cumple con los requisitos específicos de funcionamiento para el tipo de actividad que se realiza, en este caso, la podología.
Esta licencia también debe ser solicitada al ayuntamiento y, a menudo, debe ir acompañada de un informe técnico.
Licencia sanitaria
Otro tipo de licencia importante es la licencia sanitaria, que depende del cumplimiento con las normativas sanitarias locales y autonómicas. Asegura que la clínica cumple con las condiciones adecuadas de salud e higiene. Es un requisito esencial para poder ofrecer servicios médicos legales y seguros.
Esta licencia es fundamental en aquellos sectores donde se ejerce un ejercicio sanitario, como las clínicas veterinarias o el laboratorio clínico.
Obtén todas las licencias para abrir tu clínica de podología
En Núñez Esteban, contamos con un equipo de expertos que te ayudará a gestionar todas las licencias necesarias para abrir tu clínica de podología. Desde la licencia de apertura hasta las licencias de actividad y sanitarias, nos encargamos de todo el proceso.
Nuestro objetivo es facilitarte los trámites y asegurarnos de que tu clínica cumpla con todas las normativas legales para que puedas empezar a operar de manera segura y eficiente. Si necesitas ayuda, no dudes en contactar con nosotros. Empezar con el proceso para abrir tu clínica de podología con total tranquilidad nunca había sido tan fácil.